Pink Mask surge de la fusión entre el desafío y la pasión. Todo comenzó con el proyecto de desarrollar un producto que en Argentina aún no existía y con el deseo de nuestro fundador, Luciano Silvestrini, de formar su propio negocio.
Desde un departamento en Buenos Aires, se producía un solo producto que se vendía de manera online y fue el que finalmente inspiró el nombre de la marca. Luego de muchas noches sin dormir, el equipo comenzó a tomar forma. Decidimos vender no solo la Pink Mask, sino muchos otros productos que resultaban esenciales para las Nail Artist y así, expandir nuestra marca de manera global.